Asumimos los siguientes valores como orientadores del pensamiento y de la acción de cada miembro de la comunidad educativa que conformamos:
• EL RESPETO: Valor que está unido a la persona misma y a su identidad y que al mismo tiempo es derecho y deber que se practica consigo mismo y con los demás.
• LA RESPONSABILIDAD: Entendida como toma de control de la propia vida y poseer la suficiente capacidad para discernir y elegir lo que más convenga a su realización personal. La responsabilidad comprendida también como la capacidad para responder a compromisos adquiridos.
• LA HONESTIDAD: Es la certeza de que la persona que habla, expresa con sinceridad lo que sabe o siente, los honestos son: sinceros, transparentes y veraces.
• LA CONVIVENCIA: Valor que tiene sus raíces en la familia. Esta es el espacio del afecto, la comprensión, la seguridad, la confianza. Elementos que ayudan al niño y al joven en su relación con los demás y favorecen su desarrollo integral. La convivencia ciudadana es el entrar en contacto con la realidad que nos rodea, con la cotidianidad en actitud positiva, en absoluto respeto no solo con los integrantes de la familia humana, sino también hacia todos los seres de la naturaleza. Es tener conciencia social de responsabilidad con el entorno. Es reconocer el valor de las personas y de las cosas y darles el debido trato. Es sentido de pertenencia.
• LA JUSTICIA Y LA SENSATEZ: La justicia como valor es el principio moral de cada persona que decide vivir dando a cada quien lo que le corresponde o pertenece, buscando el bien propio y el de la sociedad. La sensatez se asocia a la cordura, el entendimiento, el raciocinio y la prudencia. La sensatez es uno de los mejores valores que puede tener una persona tanto para su propio desarrollo como para su relación con los demás y su papel en la sociedad.
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